viernes, 7 de marzo de 2008

También Ceama en el Cereso (parte1)

He de reconocer que en el artículo anterior me exacerbé al referirme a los internos del Ceama y sus pretensiones eyaculatorias.
También reconozco que pude haberlos juzgado mal, y, tal como platicaba con mi esposa, es una cadena en donde cada eslabón es una parte fundamental en la que todos, absolutamente, tenemos algo que ver.
Leyendo el MILENIO NOVEDADES (¡Dios mío! parece que me dan comisión, o que trabajo ahí), me encontré con la noticia de que unos chamacuelos de 17 años serían los presuntos responsables del asesinato de un joven de 23 años ahí por el norte de la ciudad, en Komchén para ser más específicos. El caso es que el MILENIO decía que estos chavales muy seguramente no irán a la cárcel, dado que son menores de edad y por ende el reglamento jurídico de nuestro tres veces H. Estado, impide a los adolescentes ser juzgados como adultos y más por ende hechos prisioneros en la cárcel de tus besos.
Luego entonces y después de mucho pelearme conmigo mismo, y que sí estoy en contra de sus cuartitos del amor, y que sí deben de tratarlos como criminales y que si estoy lo otro, es que llegué a la conclusión de que, a pesar de que es un Ceama y el nombre no me hace sentir como si en verdad se le estuviera castigando a los infractores, no deja de ser una prisión, no dejan de privarlos de su libertad y no dejan de tener antecedentes penales, es decir, pa´que me hago tantas bolas si a final de cuentas el encierro es el encierro, aiga sido como aiga sido.
En lo que definitivamente no comulgo con mi nuevo yo más tolerante, es en que si en verdad estos centros de readaptación social (llámese Cereso o Ceama) cumplen con su función de rehabilitar por el camino del bien a estos seres nocturnos de hábitos canibalescos, digo, no es una novedad que generalmente los presos que ingresan a un penal en realidad solo salen sabiendo más y mejores técnicas para delinquir, es decir un porcentaje muy elevado no se reintegra a la sociedad para ser ciudadanos de bien, muy por el contrario, el roce internacional que tienen con criminales de altos vuelos sirve únicamente para enseñarles más malas mañanas.
Es por ello que, a partir de este momento y de este post, me voy a ir directamente al cabildo meridano a presentar una propuesta que, en la práctica superará, y por mucho, la del chonchito Agustín Carstens y su IETU.
1.-El sostenimiento de un Cereso o un Ceama es en exceso caro. Tan solo como ejemplo tenemos los seis millones seis de pesos que costarán los cuartos para las visitas conyugales a los que son derechohabientes los infractores. Si a eso agregamos los costos por alimentación, mantenimiento de instalaciones, pago de sueldos de directivos, celadores y demás, tenemos que representa un gasto muy fuerte al erario que, como tanto rebuzno, sale directamente de MIS bolsillos.
2.-Cualquier empresario medianamente inteligente y con una visión mediocre de proyección empresarial sabe que la utilidad de cualquier negocio resulta de restar a los ingresos brutos los costos de producción y que si éstos son mayores que los primeros entonces la empresa no funciona, entonces la empresa se va a la quiebra.
3.-Entendemos que el Estado se regula de manera muy similar que una empresa.

3 comentarios:

Egoista dijo...

Desconozco la técnica que se emplearía para convertir a los internos sobrantes en jabón, pero apoyo la idea. De hecho si lo vemos con visión netamente empresarial, un jabón de nombre CEAMA, suena ahí, medio erótico, igual y podría competir en el mercado con los polvitos excitantes que vende Niurka en las sex shops.

Pero hablando enserio, dudo mucho que al gobierno le interese cuando se tenga que invertir para calmar a unos cuantos jóvenes impetuosos, creo que más bien busca mantenerlos apaciguados lo que resta de la actual gestión, no sé, pero tal vez dentro de algunos meses se presente otra sublevación, pero esta vez pidiendo camas de agua y espejos en los techos para los famosos cuartitos.

Saludos

Anónimo dijo...

Intentando verle el lado positivo a estos centros, tendríamos que tomar en cuenta que a todos estos adolescentes se les da la oportunidad de reintegrarse a la sociedad, no se estadísticamente cuantos los logren, pero espero que sea un buen numero, y recuerda que TODOS en esta vida merecemos segundas oportunidades.

Ruiz1 dijo...

y terceras y cuartas oportunidades? cuántas oportunidades tuvo Geovany (el niño de 8 años que degollaron en cancún por un drogadicto)para ser un ser de bien?